Tratamiento para el lipedema
A diferencia de la grasa que se acumula al ganar peso, la grasa de las zonas con lipedema no disminuye si se hace dieta o ejercicio.
Aunque aún no hay una cura definitiva, los tratamientos para el lipedema pueden ayudar a aliviar los síntomas, como el dolor y la inflamación, y mejorar la calidad de vida.

Tipos de tratamientos
– Cambios en la composición de la dieta: mantener un peso saludable ayuda a reducir la cantidad de grasa no lipedémica y puede ayudar a reducir la inflamación. Una dieta antiinflamatoria puede ser útil, pero es poco probable que las dietas de reducción de calorías afecten a las zonas grasas de su cuerpo relacionadas con el lipedema
– Compresión: se utilizan vendas para contraer (comprimir) las zonas afectadas.
– Ejercicio: el ejercicio de bajo impacto, como la natación, ayuda a aumentar la movilidad y mejorar la circulación.
– Masaje: ayuda a mejorar la movilidad y a eliminar los líquidos de la zona afectada.
– Liposucción: esta técnica elimina la grasa lipedémica de las zonas afectadas. Después de la liposucción suele ser necesario aplicar compresas para mantener la reducción.
Es importante que el médico de cabecera indique el plan de tratamiento más eficaz para la situación del paciente, y le remita a otros profesionales sanitarios y grupos asociados que pueden proporcionar apoyo e información sobre cómo tratar el lipedema.
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